Empecemos
diciendo que este
poema está sobre una hoja/ Pero este poema no es un poema y usted no
tiene que olvidarlo/ Es parecido a un muro/ La ausencia de mis
lágrimas arman un muro/ Veo por la ventana la lluvia como si la
lluvia me mirara/ Usted puede hacer lo que quiera con las imágenes
que acaba de leer/ Yo no puedo hacer nada con las imágenes que
escribo/ Ya que fructifican el resentimiento en este poema/ Que está
en los ojos de un joven sentado sobre su sonrisa/ La sonrisa de usted
no la de él/ Porque su sonrisa sin dientes es la que se mueve/
Aunque ve la débil sonrisa del joven y su cabello revuelto en el
poema/ Y el cabello y la sonrisa envejecida del joven dicen algo/ Muy
lento para que usted entienda/ Y muy débil/ Incluso parece un chiste
o algo que usted pensó en algún momento/ Y recordó y olvidó y le
deja una rara sensación en el cuerpo/ “Me parece que tenemos que
hablar de todo/ Como cuando éramos adolescentes/ Y hablábamos de
todo sin saber expresarnos/ Ahora tampoco sabemos/ Me parece que
fuimos adolescentes/ Pero nunca hemos sido jóvenes/ Como si
estuviéramos sentados más allá del deseo”/ Usted ve al muchacho
y descubre que nada es lo que vemos/ Porque no sabe si lo ve o si él
le ve a usted/ Y nada ha pasado en realidad pero tiene esa rara
sensación en el cuerpo/ Y usted, si se lo pido con confianza, me
puede ayudar/ No, en esta parte tiene que decir que “yo no necesito
ayuda”/ Usted no me puede ayudar a escribir porque yo no necesito
ayuda/ Aunque yo le escribo a usted/ Y usted no me lee/ Luego, no
puedo escribir “luego”/ Porque quiero hablarle/ Y sus palabras
están delirando en la forma de un ruido, un ruido fuerte/ La belleza
de las palabras es un ruido fuerte/ Eso es lo que tiene/ Por eso no
habla/ La belleza de las palabras es una forma del dolor, dice/ Una
forma del horror, insiste/ Por eso no habla, punto suspensivo, por
eso no lee/ ¿Ve cómo juego con el tiempo?/ Usted dice que es
imposible/ Pero esto es un poema y aquí es posible hacerlo/ Y no lo
que usted dice, que el tiempo quede sin futuro/ Pero el tiempo queda
sin futuro/ Hasta que llegue a un lugar seguro como el agua corriendo
por el cuerpo/ Que deja la sensación de humedad en la memoria/ Pero
usted no llega a un lugar seguro/ Porque en este poema no hago lo que
quiero/ Sino/ Lo que permite la sensación húmeda en las manos/ Dos
o tres frases que se olvidan/ El mismo argumento cortando las
emociones/ Ahora que estamos en esto; no le parece mejor que me
ayude/ Y este poema es una sombra avanzando/ Mientras usted hace algo
por mí/ Porque este poema es una sombra doblándose hacia usted/ Ya
que este poema está hecho de imágenes dispersas/ Que usted puede
tomar y desaparecer/ Y usted no lee y esto no deja de ser un poema/
Donde desaparecemos/ Y usted no lee porque no tiene que hacerlo/ Y yo
puedo seguir con lo que tendría que seguir/ Porque sé que no puedo
hacer nada más/ Ya que ahora me meto en el fondo de algo/ Algo que
quiero terminar y me tuerce la boca/ Usted se ríe porque hablo solo/
Cuando piensa en este poema/ Y lo único que digo/ Es que nadie me
quiere como le quieren a usted/ Y todo lo hago antes de perderme en
el círculo de la emoción/ Y eso lo sé porque yo la quiero y amo al
hombre que la ama más que al rostro sangrando/ Que desaparece en el
borde de lo que veo/ Y mi boca que ya no existe en el extremo de lo
que digo/ ¿Ve que puedo hacerlo?/ ¿ve que cuando escribo no sé lo
que hago?/ Usted sabe lo que hace/ Siempre lo ha sabido/ Y no lee
porque usted anota todo/ Yo escribo para olvidar y por eso usted no
me lee/ Este poema quiere hacerle daño/ Pero usted no me escucha y
este poema es como levantarse en la mañana/ ¿Ve que puede ser
cierto?/ Aquí tendríamos que hablar de todo/ Como cuando éramos
adolescentes/ Y hablábamos de todo sin saber expresarnos/ Porque es
lo único que nos queda/ Ahora tampoco sabemos/ Me parece que fuimos
adolescentes pero nunca hemos sido jóvenes/ Que envejecimos más
allá del deseo/ Y esto termina siendo lo único que nos queda/ ¿Ve
que aquí puede hacer lo que quiera?/ Es de mañana/ El cuerpo se
dobla hacia arriba/ Es de mañana y hay luz/ No hay nada más que
eso/ Empieza a derramarse el poema/ El poema se levanta/ Es de
mañana/ El poema se dobla/ Se arruga y usted puede verlo/ El poema
desaparece.
De mi amigo Luis Retamales.
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