domingo, 27 de marzo de 2011

Bitácora


La Marixu como terapia solía caminar en pijama de noche por República cuando todos dormían. Decía que le hacía bien para el espíritu y no debía malgastarla durmiendo. Por eso es que se levantaba después del almuerzo a hacer sus reuniones y se vestía en un dos por tres para hacer sus tantas cosas atrasada como siempre.
Extraño a la Marixu. Hacen falta mujeres como ella para tiempos como estos. De dónde sacas tanta energía le preguntaba después de correr un par de cuadras arrancando de la purga que se llevaba nuestros pañitos del frontis de la UDP. Con la pena y la rabia que tengo me bastan me decía y se iba al local de la Mary a compartir algún vinito y reclutar nuevos adherentes para su causa que hasta el día de hoy no me queda bien claro cuál era en verdad. Pero de lo que no me olvido es de su dignidad, pese a la falta de tantas cosas, de la espera de ayudas que nunca llegaron, de afectos, de soledades miserables mirando por la ventana, de luchas intestinas en busca de algunos infiltrados y la casita Okupa que reinventaron con la Mary. En fin, tenía motivos para su rabia y su pena. Hoy se cumplen tres años desde que la conocí y más de diez meses de su muerte.
Dos mujeres vienen en camino. La Amparo y la Isidora se vienen a buscar su sitio en el mundo. Uno en estos casos quiere que todo resulté bien por supuesto y se está atento a todos los por menores que conlleva el proceso. Se observan todos esos preparativos, los regalos, las ropitas y cosas que se necesitan para el momento y sin querer uno se ve envuelto en una serie de alucinaciones. Claro. Imaginando la posible vida que les toque por los azares del destino. Mi pensamiento más recurrente es que si tuvieran solo la mitad del coraje y dignidad de la Marixu me sentiría sumamente agradecido.

martes, 15 de marzo de 2011

Monólogo económico


Decidido a hacer balance
del volumen de impropiedades descritas
y de la baja de la bolsa de valores endémicos
Considerando estas últimas noticias
en frescas anunciaciones vía cibernética comunicación
y en los rostros misteriosos en fotografías 3x4
con la música acompañante en vibratos armoniosos
De la bolsa de valores dije y de la renta que generan
generalmente
Y con la pregunta silbando vía operadora larga distancia
y el humo abortado de un cigarro agonizante
que pareciera cierto lo que dice en apariencia, pero que no lo es del todo
Del consumo de cápsulas de colores diversos
y de la sed que deja, dolor de cabeza y ojeras mediante
Con la sensación de estar en el sitio equivocado
Otra vez
Del resultado de la propuesta ignorada
Porque es más fácil que considerarla, la conciencia digo
Acaso yo la tomé demasiado pronto
y ni siquiera se da cuenta
De tanto sacar cuentas alegres creo yo
De repetir que no hay mal que por bien no venga
y el bendito dicho me tiene en ascuas, aún aquí
generando monstruosos intereses, impagables te digo
Atribulado de tanta espera
En un monólogo económico eterno, siempre al alza
y el brillo decadente de una pantalla de plasma
Con el tono en espera angustiosa y la llamada casi cortada
Repartiendo miradas, que es lo que más hago
y reflejado en un vidrio biselado, que no me gusta lo que veo
ni que me vean, ni que me busquen ya
y la llamada que no fluye y yo esperando
aún esperando.